Medidas para tratar el hormigón ante las altas temperaturas
El tiempo tan caluroso que hace en verano puede mermar las excelentes propiedades del hormigón. Por tanto, hay que tomar una serie de actuaciones para preservar la calidad del hormigón bajo las altas temperatura. Se debe considerar estas medidas para que el tiempo caluroso no afecte negativamente la calidad del hormigón.
Se entiende por tiempo caluroso, aquellas situaciones que pueden provocar pérdidas en la calidad del hormigón debido a la acción de altas temperaturas, humedades relativas bajas o viento fuerte.
Las condiciones de tiempo caluroso pueden afectar negativamente al hormigón por varios aspectos: pérdida de agua prematura que origina fisuración, mayor rapidez de hidratación que conlleva a estructuras menos densas (bajada de resistencias), pérdida prematura de la consistencia que conlleva a adición de agua en obra.
A continuación, medidas para que no afecte negativamente las altas temperaturas a la calidad del hormigón:
– La importancia del curado
Curar el hormigón siempre es recomendable, pero en condiciones de las altas temperaturas, donde la velocidad de evaporación es máxima, es imprescindible curar adecuadamente el hormigón para evitar la aparición masiva de fisuras por retracción.
– Pérdidas de resistencia
Debido a la mayor velocidad de hidratación del cemento provocada por la alta temperatura, se ha observado que la densidad del gel CSH es menor en estas condiciones y, como consecuencia, en verano, se observa que las resistencias del hormigón tienden a decrecer.
La opción correcta para remediar este problema, consiste en incrementar la cantidad de cemento en 10‑15 kg/m3 o incrementar la dosis de aditivo polifuncional, que posee carácter retardador cuando se emplea a altas dosificaciones.
Es imprescindible proteger los áridos de la acción directa del sol para evitar que la temperatura del hormigón aumente, también es preferible usar cementos de bajo calor de hidratación, que hidratan más lentamente y son menos sensibles al efecto de la alta temperatura.
– Mantenimiento de la consistencia
La acción de las altas temperaturas y la baja humedad hace que incremente la tendencia a perder consistencia durante el transporte. La pérdida de cono durante el transporte es especialmente alarmante, porque aumenta la probabilidad de que se adicione agua en obra (para recuperar la consistencia perdida y facilitar la puesta en obra) y tenga malas consecuencias (especialmente, pérdida de resistencia mecánica a todas las edades).
Ante las altas temperaturas, es necesario extremar la logística de camiones para evitar largas esperas en la obra. Del mismo modo, es recomendable realizar el hormigonado durante la fracción del día menos caluroso, incluso por la noche.
– Moldes y encofrados
Es importante proteger los moldes, encofrados, soportes y armaduras de la acción del sol. En el caso de que la temperatura del molde sea excesiva puede existir riesgo de desecación de la parte de hormigón que está en contacto. En este caso, la hidratación del hormigón en la zona de contacto es deficiente y provocan pérdidas de resistencia, acabados de mala calidad que liberan mucho polvo, sin apenas resistencia a la abrasión y al impacto.
Para minimizar los daños que las altas temperaturas es necesario proteger los moldes del sol y humedecer antes del hormigonado para rebajar su temperatura.
– Conservación de las probetas
Una mala conservación de las probetas conlleva a roturas con poca resistencia y no son representativas de la realidad del hormigón colocado. En condiciones de tiempo caluroso, el hormigón de las probetas puede desecar fácilmente y falsear negativamente el resultado. Es imprescindible conservar las probetas en las zonas de sombras, por debajo de los 25 ºC, protegiendo su superficie de la evaporación.
Contacta con nosotros a través del siguiente enlace o visítanos en Calle Juan Ignacio Rodríguez Marcos, 1A Badajoz – 06010 Badajoz, llama a nuestro número de teléfono 924 244 203 o escríbenos a julia@grupoduranempresas.es.